Pucará se encuentra a 2.400 metros de altura sobre nivel del mar en una región con clima semiárido. En los viñedos de gran altura la radiación solar es más intensa, el aire más limpio y el agua de deshielo muy pura. Lo más importante para la calidad del vino es la amplitud térmica diaria con la cual contamos. Cuando la diferencia de temperatura entre el día y la noche es mayor a 18 °C se habla de una amplitud térmica: en Pucará tenemos un promedio de más de 25 °C entre día y noche y puede hasta llegar a 35 °C teniendo noches de invierno con -14 °C. Gracias a estas condiciones nuestro terruño es muy particular y único en el mundo y los efectos de esta gran amplitud térmica son el sello de identidad del «Pucará».
